sábado, 31 de enero de 2009

El asesino de mi padre


A veces, queremos vengarnos de alguien por algo injusto y no podemos ya que el idiota ha desaparecido y no tenemos nada que hacer.


Yo personalmente tengo de quien vengarme, pero me siento impotente ante su poder, el está en todas partes y aunque tenga un millón de personas apoyándome, nunca lograré destruirlo.


Ese patán que me llena de rencor cada vez que pienso en él, el mismo ruin que asesinó a mi padre es nada más y nada menos que el cigarrillo.


Me disculpas si fumas, pero si algún día me conoces, cuando estés cerca de mi no lo hagas por favor.

Y es que a veces me pongo a pensar y me rio preguntándome, ¿Qué diablos tiene de interesante coger y votar humo por la boca? Si lo único que te provoca es dañar tu organismo más y más.


A ti que fumas. No te has dado cuenta de que cada vez que estas un tiempo sin él tus nervios tiemblan y necesitas de él para calmarte, eso quiere decir que te estás volviendo adicto y tu organismo necesita de él para sobrevivir. Idiota se está apoderando de ti y te está destruyendo poco a poco, ¿y sabes qué? Se divierte haciéndotelo.


Lamentablemente yo no puedo hacer nada, ya que tu no lo vas a dejar por estas estúpidas palabras, Ves a lo que me refiero, ahora bien, si te vas a dejar destruir, no lo hagas frente a mi, no te quiero ver morir, otra persona mas que se va lejos de aquí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario